POEMAS, CANTE Y EMBRUJO
En el arte todo es posible. Las combinaciones
artísticas pueden ser muchas y de muy variada índole. Ayer, en los jardines de
la Casa de Zorrila, compartieron protagonismo sobre el entarimado, los poetas:
Inma Calvo, Pablo Otero, Ana Negro, Mar Gómez y Jorge Múrtula, acompañados por
los rasgueos guitarrísticos de Juan Cantinas Y Oscar Vecino y el sentido cante
flamenco del cantaor Santiago Gegúndez, que actuó en el ecuador de la sesión
poética.
No es ni será el primer experimento que se hace de
este tipo. Yo, desde luego, no lo repetiría. Y no por la calidad individual de
los actuantes musicales, que quedó de sobra contrastada, sino porque la
presencia de las guitarras, a mi entender, sobraba. Un acompañamiento de este
tipo hubiera encajado bien en el poema declamado por Inma sobre Vicente
Escudero y quizás en el recitado por
Jorge Múrtula sobre García Lorca (por cierto, acompañado con poca fortuna al
escucharse el Romance de Juegos Prohibidos como música de fondo). En el resto
de las actuaciones, el sonido musical, no sustentaba la esencia temática de las
composiciones que se estaban declamando.
Sobre gustos no hay nada escrito, pero, puesto que
estábamos en un jardín romántico ¿qué
tal hubiera quedado escuchar de fondo y a menor volumen, "Noches en los
Jardines de España" de Manuel de Falla, citado, por cierto, en uno de los
poemas?





