jueves, 22 de noviembre de 2018


PREMIO CERVANTES 2018

El premio Cervantes considerado como el Nobel de las letras hispanas, y dotado con 125.000 euros, ha recaído en el presente año, en la poeta uruguaya Ida Vitale.

Esta mujer se incorpora, a la reducida nómina de féminas galardonadas con este premio en los 40 años de historia del Cervantes. Antes que ella lo recibieron María Zambrano, Ana María Matute, Dulce María Loinaz y Elena Poniatowska.

Nacida en 1923, Ida Vitale es la última sobreviviente de la generación del 45 de la que formaron parte, entre otros, intelectuales como Mario Benedetti, Carlos Maggi o Ángel Rama(su primer marido).

Es autora de poemarios tan importantes como, Palabra dada, Mella y Criba, La luz de esta memoria, Paso a paso, Jardín de sílice, etc. En todos ellos su lenguaje está cargado de ironías y sutilezas en las que se detecta un claro influjo de Juan Ramón Jiménez, a quien considera su maestro en la poesía.
Acumula en su currículo importantes reconocimientos entre los que se encuentran el premio Internaional Octavio Paz de poesía(2009); Premio al Mérito Cultural de la Ciudad de México Carlos Monsivais ( 2014);Premio Internacional Alfonso Reyes (2014); Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana(2015); Premio Federico García Lorca (2016) ; Premio Max Jacobs (2017) y el Premio de la Feria del Libro de Guadalajara ( 2018).

Poeta, ensayista, crítica literaria y traductora, ha colaborado en numerosas publicaciones en los distintos países en los que vivió. Primeramente en México, a dónde emigro a causa de la dictadura uruguaya de aquel tiempo, después en Francia y últimamente en Texas (EE.UU.).

Vitale siempre ha sentido rechazo por la llamada poesía social o comprometida, porque con ella" ningún poeta ha conseguido el momento más decoroso de la poesía",  ni siquiera Pablo Neruda," cuyos mejores libros—afirma— no son los políticos"

El jurado,  presidido por la escritora y académica de la RAE, Carme Riera, ha otorgado el premio a esta escritora "por su lenguaje, uno de los más destacados y reconocidos de la poesía hodierna en español, que es al mismo tiempo intelectual y popular, universal y personal, transparente y honda. Convertida desde hace un tiempo en un referente fundamental para poetas de todas las generaciones y en todos los rincones del español".

La galardonada recibirá el premio el próximo 23 de abril (fecha del fallecimiento de Miguel de Cervantes) en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares.



domingo, 18 de noviembre de 2018


PASAJES DE "CÉCILE. AMORÍOS Y MELANCOLÍAS DE UN JOVEN POETA" (51)

CAPÍTULO VI
La ilusión
..............................................
Faltaba más de una hora para el comienzo de la reunión y ya Margarita, se encontraba impaciente esperando a su querido Nacho. Preguntó unas cuantas veces a mi madre si el vestido verde veronés que estrenaba no marcaba sus formas, pese a ceñirlo con un cinturón ancho de amplia hebilla, y no dejaba de comprobarlo mirándose una y otra vez ante el espejo del gabinete materno, adoptando todas las posturas imaginables. A mí me consultó si lo que resultaba más apropiado para el peinado recogido que llevaba, era una cinta o un prendedor. “¡Anda, maja!”, le contesté, que era una manera de indicarle que se estaba poniendo muy pesadita, y la pobre se quedó con la duda mientras se limaba por enésima vez las uñas. El no hacerle caso era fruto de mi nerviosismo. Bastante tenía yo con componer mi vestuario para que mi figura recordara, siquiera en este apartado, a la de Humphrey Bogart, puesto que me iba a emparejar con Audrey Hepburn. Por fin me decidí por un jersey gris de cuello en pico complementado con unos pantalones “príncipe de Gales” que conservaban todavía la prestancia de la primera puesta. Rebusqué en el armario una camisa a juego, hasta decidirme por una a cuadros que, con el complemento de las ballenas en el cuello, quedaba muy aparente. No abroché intencionadamente el primer botón, pensando que este detalle me daría un aspecto de descuidada elegancia que no pasaría desapercibido para Cécile. Con una crema facial traté de disimular los pequeños cortes con los que la hoja Palmera me había señalado la cara esa misma mañana y que no eran sino consecuencia de mi inexperiencia en el tema del afeitado. Me apliqué a continuación un buen masaje con el Floyd, por sus efectos cicatrizantes, pareciéndome después que una fragancia varonil más intensa, aumentaría mi atractivo, por lo que no dudé en perfumarme con el “Varón Dandy”, paterno, aunque el aroma delatara su procedencia.
Pronto llegaron los invitados y, entre ellos, Nacho, que al ver a mi hermana volvió a exclamar: ¡Wooooaaahhh! que al parecer era lo único que salía de su boca cuando la belleza de Margarita le agarrotaba sus cuerdas vocales. A mí me sucedió con Cécile casi lo mismo. Quedé tan impresionado con su elegante forma de vestir que no pronuncié palabra cuando le di los besos de bienvenida. Llevaba un vestido rojo y una elegantísima torerita negra que realzaban ¡y de qué manera! sus formas adolescentes y su evocador cuello de cisne, resaltando de paso aquellos ojos de intenso azul que iluminaban mis días cuando los contemplaba y mis noches cuando los soñaba. A la que no se le cortó el habla fue a Goyita. Ponderó la decoración, alabó la pista de baile, pero no pudo disimular su alegría cuando descubrió las “medias noches”. Por su parte, Daniel, tuvo el detalle de traer de casa un surtido de discos de música variada: valses, tangos, boleros y rancheras.
                       ...................................................
                                                                      

jueves, 15 de noviembre de 2018



PASAJES DE "LAS LAMENTACIONES DE MI PRIMO JEREMÍAS" (51)
CAPÍTULO III
La casa del abuelo
..................................................................
Después de soltar esta perorata, el abuelo, estirando y encogiendo párpados y labios, se agarró a la silla, luego a la mesa, se cambió de mano por dos veces el bastón y dando un fuerte resoplido, consiguió por fin sentarse.
Como si el quejido fuera una señal de inicio, mi madre aprovechó la ocasión para bendecir la mesa, como hacíamos todos los días.
―Te damos gracias, Señor, por el alimento que tan generosamente nos concedes. Fortalece nuestro cuerpo y aumenta nuestra fe para que, siendo fieles al Evangelio, compartamos un día con nuestros hermanos mejores manjares en la mesa celestial de tu Reino.
―Amén ―respondimos todos al unísono, no con tanta devoción como deseosos de paladear cuanto antes las exquisitas judías estofadas que Petra nos había preparado.
Mi madre, atenta como siempre al más necesitado, creyó que era urgente atender a Jeremías, y en un tono jovial le dijo:
―Ea, Jeremías acércame el plato, que por ser nuestro invitado, te voy a servir el primero.
Jeremías se sonrió y, una vez servido, sin esperar a que las judías llegaran a nuestros platos, sumergió la cuchara en el suyo y las fue engullendo con tanta animosidad que cuando mi madre concluyó la ronda, preguntó:
―¿Se puede repetir?
―Si hijo, faltaría más ―dijo mi madre, escanciándole otros dos buenos cazos de judías.
―Si quieres, puedes comerte las mías ―arguyó el abuelo quién, entornando los ojos, quizás recordando épocas pasadas, exclamó resignadamente:
―Ya no me vuelve el apetito, aunque tenga delante unas buenas judías con chorizo.
Durante unos minutos sólo se oyó una sinfonía de percusión en la que las cucharas, como improvisadas baquetas, golpeaban con energía los platos, hasta que el abuelo, que asistía resignado al espectáculo, tomó la palabra para decirnos lo que seguramente había estado rumiando en los últimos meses de soledad:
                                                                               .......................................................


domingo, 11 de noviembre de 2018



CONCIERTO EN LA CATEDRAL DE VALLADOLID

El pasado viernes, cuantos nos acercamos a la Catedral, tuvimos ocasión de escuchar al coro "Schola Antiqua", dirigido por Juan Carlos Asensio, en un Concierto enmarcado dentro de los Actos Conmemorativos del IX Centenario del Fallecimiento del Conde Ansúrez, repoblador de la ciudad de Valladolid.

La "Schola Antiqua", desde su fundación en 1984, ha venido actuando en festivales en Europa, Estados Unidos, Centroamérica, Próximo Oriente y Japón. Su amplia discografía incluye trabajos dedicados al canto mozárabe, al canto gregoriano y a reconstrucciones históricas de polifonía. Entre sus proyectos para este curso figuran su participación en el Festival de Música sacra de Bogotá, en la Capilla Palatina de Aquisgrán, en la abadía de Ciervaux y la reconstrucción de las Vísperas Solemnes de Confesores de José Nebra junto a La Grande Chapelle.

En la primera parte, este coro madrileño interpretó magistralmente, varios oficios de difuntos de canto hispano visigodo (mozárabe) que surge de la unificación del rito litúrgico hispano en el Concilio de Toledo de 633, bajo la tutela de San Isidoro de Sevilla.

La segunda parte estuvo dedicada al "officium defunctorum" en una bella conjunción de voces en polifonía gregoriana.

Ambas actuaciones que corresponden a música de réquiem en tiempos del Conde Ansúrez (1037-1119), fueron muy aplaudidas por el entendido público que llenaba el amplio espacio de la seo herreriana.

Este concierto, es el segundo de un total de cuatro que ha sido organizado por la Fundación Joaquín Díaz y el Ayuntamiento de Valladolid y se completará los días 22 y 23 con un simposio en el que cinco expertos hablarán, en la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción, sobre las distintas músicas medievales.

Dada la elevada calidad de los participantes, será muy interesante poder asistir tanto a las audiciones así, como al propio simposio.

Fotografía de Santos Pintor Galán