jueves, 28 de septiembre de 2023

 

SUEÑOS Y...SUEÑOS

 

 

Ensimismado en la conclusión de un poema dedicado, como siempre, a la mujer que le tenía obnubilada la razón, no se percató de que faltaban tan sólo diez minutos para llegar al despacho. Rápidamente, se enfundó los pantalones , deslizó el peine sobre el cabello y agarrando la americana, bajó precipitadamente las escaleras. Por el camino, extrajo de uno de los bolsillos la corbata y se la anudó al cuello mientras mentalmente repasaba las estrofas de su reciente composición. Reconoció, que tampoco hoy, había sabido plasmar sus sentimientos con la profundidad de los grandes poetas y presintió que aquella tarde no ilusionaría a su amada con la lectura de unos versos tremendamente lánguidos e inexpresivos. Habían pasado tan sólo unos meses desde que se conocieran. El bufete donde él trabajaba, distaba muy poco de un comercio dedicado a la venta de colchones y somieres, en donde ella prestaba sus servicios. Así, la proximidad hizo, que ambos coincidieran en una cafetería cercana. Desde el primer momento sintió por la muchacha una atracción irresistible y cuando tuvo ocasión de entablar conversación con ella, le manifestó su inclinación por la poesía, recitándole cada tarde, como prueba de su afición y del creciente deseo de conquistarla, la lectura de unos versos. En su encuentro diario, ésa era la excusa perfecta para iniciar la conversación. Sin embargo, a medida que agotaba el caudal de su exigua producción poética, tenía cada vez más dificultades para cumplir con el ritual de bienvenida. Aquella tarde, para salir del paso, no tuvo más remedio que copiar unos versos de Neruda. Al leérselos, notó un brillo especial en los ojos de su amada.

—Son exquisitos—dijo, ella—.Sigue componiendo para mí. ¡Quiero seguir soñando con tus versos!

Viendo nuestro joven abogado, que le sería imposible continuar con la farsa, no tuvo más remedio que confesar sus carencias poéticas. 

—En realidad, los versos no son míos. Pertenecen a Neruda. He agotado el caudal de mi parca inspiración. Sólo quiero hacerte feliz y he buscado unos versos que estuvieran a la altura de mis sentimientos.

La muchacha sonrió, agradeciendo la sinceridad del pretendiente, y mirándole a los ojos, le comentó;

—Agradezco tu franqueza. ¡Ojalá yo pudiera sincerarme como tú, con mis clientes! Mira: cuando tengo que vender un colchón, pondero de tal manera su elasticidad y textura, haciendo tanto hincapié en sus bondades, que  los futuros compradores acaban creyendo que, con tan sólo descansar en él, sus sueños  superarán a los de los demás mortales. ¿Ves? Yo también falseo la verdad, para conseguir mis objetivos.

Luego, mirándole con dulzura añadió:

— Regálame cada día un poema, aunque no sea tuyo. ¡quiero seguir soñando! ¡quiero que juntos soñemos!— Y, bajando el tono de voz, casi en un susurro, concluyó diciendo con una pícara sonrisa:— Cuando llegue el momento, soñaremos juntos.

 

Fotografía de Pedro de la Fuente.

 

domingo, 24 de septiembre de 2023

 

LA REFORMA

Crónicas de mi Periódico

                                   24 de septiembre de 2023

CUATRO PERSONAS JUSTAS

 

 

 

Cuatro personas justas, o si lo prefieren; justo, cuatro personas, son las que necesita el ganador de las elecciones, el señor Alberto Núñez Feijóo, para ser proclamado Presidente del país que mayoritariamente lo eligió. No lo tiene nada fácil, la matemática parlamentaria no le favorece. Necesita 176 escaños y cuenta solo con 172 y dudo mucho que haya en el hemiciclo cuatro personas dispuestas a perder sus privilegios por apostar por una decisión que ahorraría muchos sinsabores y bastante más dinero a un país hipotecado por las ansias  de un sátrapa que quiere continuar en la Moncloa pagando cualquier precio, aunque en ese pago incluya saltarse Principios Constitucionales.

En esta misma semana, ya hemos asistido al primer pago a cuenta de Sánchez a los independentistas al permitir y aprobar más tarde, la Ley que oficializa el uso de Lenguas cooficiales en la Cámara Baja, con un primer atropello al permitir usarlas antes de ser aprobadas. Este gasto inútil pero imprescindible para que Sánchez se congracie con independentistas es contrario a lo que expresa la Constitución en el Título preliminar. Artículo 3: “El castellano es la Lengua oficial del Estado, Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla”. Con esta Ley, el  hemiciclo puede convertirse  en una colosal Torre de Babel, eso sin tener en cuenta la injusticia que supone no introducir traducción simultánea para las otras dos Lenguas oficiales de España: el Valenciano y el Aranés y los múltiples dialectos como, Aragonés, Bable o Asturiano, Leonés, Andaluz, Canario, Extremeño, Murciano y Romaní. Sobre este asunto no se ha pronunciado la Ministra de Igualdad, muy ocupada últimamente en que no la descabalguen de su silla.

Por si la investidura de Feijóo resultara fallida, el mayor felón del Reino, valiéndose primero de la vicepresidente alcahueta, Yolanda Díaz y después empleando una vez más, la jeta impresionante que se gasta para decir una cosa y al poco tiempo la contraria, ya habla claramente de “Amnistía” para los condenados por el procés, lo cual, para cualquier jurista medianamente formado es más anticonstitucional que el indulto, que también lo es. Pero ya sabemos, por ocasiones anteriores, que eso no será un gran problema para él, acostumbrado a saltarse la Ley con la ayuda de sus amigos del Tribunal Constitucional.

Creo que lo dije en una ocasión anterior: de producirse la Amnistía, no habría ningún motivo para que permanecieran por más tiempo en la cárcel, miles de reclusos que han cometido delitos de menor cuantía que el de perpetrar un Golpe de Estado.

Ante estas decisiones arbitrarias que atentan contra la igualdad de todos los españoles, es necesario que la sociedad civil exprese con total contundencia nuestro más firme rechazo a quien pretende gobernar el país valiéndose de amañar a su antojo la Constitución con artimañas complacientes para los delincuentes, empleando métodos  nada recomendables.

Hoy, domingo, podemos expresar nuestra disconformidad con lo que está sucediendo, asistiendo a las manifestaciones que tendrán lugar frente a los ayuntamientos de todas las ciudades de España y que en Madrid tendrá lugar a las 12 de la mañana en la Plaza de Felipe II.

 

 

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jueves, 21 de septiembre de 2023

 

CELAJE OTOÑAL

 

 

Tiene el cielo un color gris plomizo

de vergüenza acumulada.

Tres largos meses sin lluvia

han contemplado el marchitar de los campos,

la sequedad extrema,

el desesperado grito de flores abortadas

y el deslizar interrumpido

del agua cristalina en los arroyos.

 

Por fin, felizmente,

se abrieron las compuertas celestiales

refrescando con riegos abundantes

la tierra árida,

 

¡Ay, mi Castilla!

¡La Castilla despoblada!

 

En la Plaza del pueblo

se escucha el lamento:

“Esto hace tres  meses…”

 

Esperan impacientes los aperos

el momento de arañar la tierra

para sacar su jugo y procurar sustento

con redoblada esperanza cada año,

a pesar del retraso acuoso,

y a pesar de todos los pesares.

 

Pasan las nubes, de nuevo,

regando profusamente páramos y valles.

La vida en el pueblo vuelve a interrumpirse

con la eterna sensación

de estar pagando por pecados no cometidos.

 

Un único niño chapotea en el parque infantil

en donde crecieron demasiadas malas hierbas.

La nube gris descarga el granizo

y la riada desborda, sin piedad, los arroyos.

 

Fotografía de Maribel Díez Salgado

 

 

domingo, 17 de septiembre de 2023

 

SORPRESAS TE DA LA VIDA

 

 

(Obra teatral en tres Actos)

ACTO PRIMERO

(Modesto llama por teléfono a su ex-compañero Juan)

 

Modesto (llamando)—Ring, ring...

Juan—Sí. ¿Quién me llama?

Modesto—Soy yo, Juan, tu amigo del instituto. Puede que te extrañe mi llamada, pues hace tiempo que no nos vemos, pero es que me acordado de ti porque tengo un pequeño problema y, tal vez, tú podrías orientarme.

Juan—¡Ah, Modesto! Creo que me acuerdo de ti. ¿No eras un tipo bajito, con gafas y muy tímido?

Modesto—Sí, el mismo. Has dado en el clavo. Bueno, ahora uso lentillas, pero lo que es crecer, no he crecido mucho y sigo siendo tan tímido como hace unos años.

Juan—Dime, muchacho, ¿cuál es tu problema y en qué puedo ayudarte?

Modesto—Recurro a ti ya que siempre has tenido fama de juerguista y de bailón y la razón es que he conocido a una chavala que me gusta un montón, pero que no se pierde una tarde sin bailar, y yo en ese tema soy un patoso. Quizás tú me podrías indicar algún sitio en que me dieran algunas clases de salsa, bachata, merengue, rumba, etc., que son las preferidas de esa deliciosa niña.

Juan—Yo no te recomendaría ninguna academia. A bailar se aprende en los antros y a vivir la vida se aprende en la calle. Ya ves, yo no tengo oficio ni beneficio y con el trapicheo y cuatro cosillas más vivo de maravilla. Pero dime,  ¿a qué discoteca soléis ir?

Modesto—Hoy he quedado con ella a las siete en "Manhattan".

Juan—Vale. Pues esta tarde me presento allí y bailo con la muchacha. Entretanto, tú te fijas cómo nos movemos, y a la vuelta de unos días, ya verás que tienes tanto ritmo en el cuerpo que  te pueden  confundir con un caribeño.

Modesto—Me parece una buena idea.

Juan—Allí nos vemos, chaval. Para mí es un placer poder ayudarte. Chao.

Modesto—Gracias, Juan. Tú sí que eres un buen amigo.

 

ACTO SEGUNDO

(Tres meses más tarde, Modesto llama por teléfono a su ex-compañero Tomy)

 

Modesto(llamando)—Ring, ring.

Tomy—¿Quién me reclama?

Modesto—Buenos días, Tomy. No sé si te acordarás de mí. Fui tu compañero en el instituto. Un muchacho, por aquel entonces, bajito y con gafas del que os reíais bastante.

Tomy—¿Bajito?...¿Con gafas? A ver, déjame que piense...¿No serás tú "el cuatro ojos"?

Modesto—Sí. Ese era el mote que tenía.

Tomy—¡Haber empezado por ahí! Todavía me parto de risa al recordar la cara que ponías cuando te daba collejas. La verdad es que no pensaba que me volvieras a hablar en la vida, pero dime, ¿cómo has dado conmigo?

Modesto—Verás, es que me he enterado que eres un experto tatuador.

Tomy—En realidad trabajo de reponedor en un supermercado, pero en mis horas libres hago en mi casa tattoos, pero sin factura. Tú ya me entiendes.

Modesto—Te entiendo perfectamente. Por eso no hay problema.

Tomy—Y dime, "cuatro ojos" Ja,ja,ja. ¿Me has llamado para que te haga un tattoo?

Modesto—Más que uno serán dos; es que he conocido a una chica maravillosa que me ha dicho que, si quiero salir con ella, nos tenemos que tatuar los dos el mismo dibujo. Quiere que sea un corazón atravesado por una flecha y que esté más o menos a la altura del mismísimo corazón.

Tomy—¡Eso está hecho! Empezaré contigo y luego otro día me traes a la chica.

Modesto—Tendré que estar yo presente, ¿no?, para que el dibujo resulte idéntico.

Tomy—No es necesario: Es más, creo que debe de venir sola, porque tengo que tatuar en terreno montañoso y tu presencia la puede poner nerviosa.

Modesto(resignado)—¡Siendo así! Confío en ti y espero que hagas un buen trabajo.

Tomy—Descuida, "cuatro ojos", con los amigos suelo esmerarme. Por cierto, ¿no me guardarás rencor por lo del mote?

Modesto—En absoluto. Esas eran cosas de chicos. Me parece que eres un buen amigo.

 

ACTO TERCERO

(Unos meses después, Juan y Tomy coinciden en las dependencias de la Agencia Tributaria))

 

Juan—¡Tomi! ¡Pero qué casualidad vernos de nuevo.

Tomy—Hacía años que no te veía, pero lo fastidiado es que nos encontremos aquí. ¿Qué querrá esta gentuza de nosotros?

Juan—Ni idea, a mí me han citado a las once.

Tomy—Pues a mí también. Se ve que ahora citan por parejas para ahorrar tiempo. ¡No trabajan nada! Ja,ja,ja.

(La Secretaria del Delegado Territorial abre la puerta).

Secretaria—¿Don Juan? ¿Don Tomás?

Juan y Tomy—¡Presentes!

Secretaria—Ya pueden pasar. El Señor Delegado les está esperando.

Modesto—Pasad, pasad, par de sinvergüenzas. Hace tiempo que os quería echar el guante.

Juan—No te pongas así, Modesto. Si quieres, yo te puedo explicar.

Tomy.—Yo también te puedo contar lo que me ocurrió con tu recomendada.

Modesto—Quizás ya es demasiado tarde. No me importa que me llamarais "cuatro ojos, ni que, de adolescente, tuviera que soportar toda serie de burlas. Eso lo doy por olvidado. Lo que me ha molestado es que tú, Juan, además de bailar con la chica que entonces me gustaba, la enseñaras  a tener contigo otros movimientos que no pertenecen a ningún tipo de baile caribeño. En cuanto a ti, Tomi, con razón querías estar a solas con ella. Parece ser que dedicaste mucho tiempo a dibujar en terreno montañoso. Ahora, Juan, vas a tener que demostrar de dónde sacas el dinero para tener el coche y el tren de vida que llevas sin haber hecho nunca la Declaración de la Renta. Y tú, Tomy, tendrás que ponerte al corriente de pagos con la Agencia Tributaria, por tener una profesión no declarada de la que obtienes pingües beneficios.

No tengo más que deciros.

 

(Mientras cae el telón, Juan dice a Tomy: "¡Cómo está el mundo, ya no te puedes fiar ni de un amigo!".

 

FIN

 

jueves, 14 de septiembre de 2023

 

LA VIDA DE MAGÍN PUERRO

-V-

 

 

"Ay, Magín, qué tonto eres

despreciando a una mujer

que en tus brazos piensa arder

complementando el sustento,

sin forzarte al casamiento

y sin nada que temer.

 

Me da que pensar tu hombría,

pues otros obreros tuve

de los que de ellos obtuve

placer y mutuo contento.

No quiero que tu lamento

sea si no te retuve."

 

No dije nada, tan solo

pedí lo que me debía

porque yo lo que quería

era dejar olvidada

a esta desvergonzada

en su guarida sombría.

 

Dicen que Dios siempre premia

al hombre cabal y honesto,

lo aseguro, porque esto

fue lo que a mí me ocurrió:

la dicha me sonrió

cuando conocí a Ernesto.

 

Este hombre trabajaba

vendiendo por tierras vascas

ganado, y en todas tascas,

se paraba a hacer negocio.

Bebimos y, como socio,

dejamos secas las frascas.

 

 

 

domingo, 10 de septiembre de 2023

 

FRENTE AL MAR

 

 

 

Tengo ante mí,

un mar abierto, voluptuoso,

encrestado de plata,

grandiosa plataforma

de azules ondulantes.

Nace de su seno una fuerza

inmensa, contagiosa

que me anima a creerme poderoso

viéndole desde la playa,

en donde reposa mi alma

mal herida, llagada por el dolor acumulado

de los días inciertos.

Me asombra la humildad

con la que se tiende a mis pies

y saludo con una sonrisa

el reflejo irisado de su cara amable

bajo un sol que reverbera

juguetón en el horizonte.

Hoy, más que nunca, quisiera ser mar,

mostrarme plácido o embravecido a voluntad,

siempre seguro, como él, del enorme potencial

que atesoran sus entrañas.

Hoy, más que nunca, quisiera sumergirme

en su elemento, nadar hasta alcanzar

la costa acantilada en donde  

encontrar ¡al fin! la presencia anhelada

de una diosa que repare de mi alma, la sustancia.

 

Fotografía de María Teresa Álvarez.

 

 

 

jueves, 7 de septiembre de 2023

 




PASAJES DE "LAS LAMENTACIONES DE MI PRIMO JEREMÍAS" (97)

CAPÍTULO VII

Se acerca la Fiesta

 

 

...................................

―¡Qué suerte tenemos en este pueblo con eso de estar a medio camino entre Zamora y Salamanca! ―dijo Petra, abrigando al abuelo―. Así, cuando se cruzan los coches, en un momento se pueden fisgar las andanzas de todo el personal.

Cuando los autocares abandonaron la Plaza, el gentío inició la diáspora hacia sus casas y, salvo el abuelo, que continuaba destemplado, los demás salimos al balcón de espectacular enrejado, desde donde, tiempo atrás, el bisabuelo Damián contemplara el pueblo rendido a sus pies. Desde allí, Margarita, por lo general parca en palabras, reparó en una muchacha que lucía un bonito vestido de «callos» y preguntó a mi madre si podría tener otro igual. Tinín puso su atención en un puesto de chucherías colocado delante de la panadería, haciendo cábalas en qué podría invertir la propina, y yo me fijé en una mujer de melena rubia y exuberante delantera, que al andar se balanceaba sobre los finos apoyos de los tacones, mientras sujetaba con una mano la maleta y con la otra el ala de una llamativa pamela, como si de esa manera además de mantener el equilibrio, intentara pasar desapercibida.

―¿Quién es esa señora? ―pregunté.

―¡Mira el muchacho en quién se va a fijar! ―saltó Petra―. ¿No sabes que en todos los pueblos tiene que haber un tonto y una puta? Pues si ya conoces a Tomasete, ahora tienes delante la que te faltaba.

―Petra; no hables así de una mujer, y menos delante de los niños ―dijo mi madre, disgustada―; no se puede juzgar a las personas sin conocer sus circunstancias.

―Tiene razón Consuelo ―opinó el abuelo, desde la habitación―. Susi, de moza, era muy buena chica, pero luego, al quedarse huérfana, su mala cabeza la hizo perderse en Salamanca.

―Muy perdida no está ―matizó Petra―, que algunos del pueblo siempre la encuentran en el barrio que hay detrás de la Clerecía. No tienen más que preguntar por Susana, la Gata, y dan con ella.

                                                                                      ..........................................

domingo, 3 de septiembre de 2023

 

HAIKUS DEL CALOR MODERADO

 

 

Maravilloso

es poder escribir

mirando el valle.

 

Sin los agobios

del terrible calor,

nacen ideas.

 

Vestido rosa

lleva puesto esta tarde

la clavelina.

 

Sábanas frescas,

sugiere la comida

dormir la siesta.

 

Alguien pensó

que el mes no acabaría

el treinta y uno.