CONCIERTO EN EL CENTRO CULTURAL
MIGUEL DELIBES
El pasado diez de febrero tuve la ocasión de asistir
en el Auditorio Miguel Delibes de Valladolid, a un espléndido concierto en el
que, Vasily Petrenko dirigiendo la Orquesta Sinfónica de Castilla y León y
Daniel Ciobanu como pianista, nos deleitaron con el siguiente programa:
BENJAMIN BRITTEN (1913-1976)
Peter Grimes: Cuatro interludios marinos
Dawn
Sunday Morning
Moonlight
Storm
SERGUÉI
PROKÓFIEV (1891-1953)
Concierto para piano y orquesta nº 3 en do mayor,
op.26
EDWARD ELGAR (1857-1936)
Variaciones sobre un tema original. op.36, "Enigma"
Una
hora antes del comienzo de este concierto y en una sala aneja, el musicólogo
Doctor don Ignacio Nieto Miguel, profesor de educación musical en la
Universidad de Burgos, valiéndose de un piano y medios audiovisuales, dio una
estupenda charla explicativa sobre los compositores y obras que escucharíamos
momentos después y que hicieron mucho más amena la posterior audición.
Los
interludios marinos de Britten, no resultan fáciles de entender, toda vez que
el estilo de este compositor británico nada tiene que ver con la de sus
inmediatos antecesores, más propensos a componer música folclorista. Britten
basará sus libretos y su música en describir los ambientes sociales más
sórdidos. En este estilo crea algunas de las mejores óperas del siglo XX. como Peter Grimes. Los interludios escuchados
se encuentran situados en momentos que separan los diferentes actos de esta
obra.
Como
estudiante de conservatorio, Prokófiev no fue solo un prodigio del piano, sino
que tuvo vocación de compositor desde muy joven. Tenía la costumbre de anotar
ideas, fragmentos melódicos, progresiones armónicas y entramados
contrapuntísticos que le servirían más adelante para escribir composiciones de
éxito. Quizás de los cincos conciertos para piano que compuso, sea el nº 3 el
más popular. En esta composición el grado de virtuosismo tiende al extremo y
arrebata al espectador por su inspiración melódica.
La
vida de Edward Elgar no habría pasado del anonimato si no hubiera sido por los
continuos ánimos que le infundía su esposa Alice. Siendo un modesto profesor de
música llegó a componer catorce Variaciones,
cada una de ellas dedicada a una persona amiga. La importancia de su obra
reside en la maestría de su orquestación de factura germánica. Su novena
variación, denominada Nimrod, en la
actualidad suele interpretarse en memoria de ciudadanos ilustres recientemente
fallecidos. Es un fragmento de belleza incontestable que marcará el sonido
musical del imperio británico.
En
cuanto a la audición de este concierto, puedo decir que fue un privilegio
escuchar el virtuosismo del pianista, Daniel Ciobanu, poseedor de una técnica
depurada que maravilló con la dificilísima interpretación de la obra de
Prokófiev. No es extraño que atesore en su curriculo una extensa y variada
lista de reconocimientos y premios.
Vasily
Petrenko director musical de la Royal Philarmonic Orchestra y director titular
de la Joven Orquesta de la Unión Europea, fue el encargado de dirigir esta
espléndida delicia auditiva. A sus órdenes la orquesta Sinfónica de Castilla y
León (OSCYL) brilló, como de costumbre, a gran altura.
Referencias
en YouTube
BRITTEN: Four Sea Interludes from "Peter
Grimes"
https://youtu.be/VTd2aXLTA84
PROKÓFIEV:
Concierto para piano nª 3 https://youtu.be/u22TUWJYV8Y
ELGAR:
Variaciones Enigma https://youtu.be/vLNLvcBmoqo
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