domingo, 21 de agosto de 2022

 

EMBRUJO PARISINO

 

 

 

La belleza envidiaba su melena

hecha rizos, cascadas en la espalda,

brillantes azabaches que en la falda

contrastaban con el azul del Sena.

 

Al mirarla dije: ¡Enhorabuena!

Por fin he encontrado la guirnalda

Que, de tener los ojos esmeralda,

harían de mis sueños dicha plena.

 

Advertí que su vista me seguía

allí donde estuviera, controlaba

cada paso que daba ¡qué sería

 

aquella fijación que enamoraba!

Un anuncio del Lido sugería

por ir a verla. ¡Cuánto me costaba!

3 comentarios:

  1. Precioso soneto. Aunque el formato del blog no permite apreciar la disposición de los versos y las estrofas, la cadencia y la rima son impecables. Muchas felicidades al poeta de Valladolid.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, amigo. Te recomiendo que leas el soneto en la pantalla de un ordenador. A mí me pasa lo que a ti, cuando lo veo en mi móvil, los versos se montan. Te deseo que pases una buena noche. Abrazos.

      Eliminar
    2. S.D.Carlos Malillos Rodríguez. Es usted la Excelencia de la lectura cálida, por la perfección.
      Dulce,Ensisadora,& ATRACATIVA^ de
      Emociones..Gracias

      Eliminar