EL PROTAGONISTA DE MIS RELATOS
Llegó
el tiempo de decir
a
quien me quiera escuchar,
que,
como todo juglar
o
contador de relatos,
lo
que digo no son datos
de
que poderse fiar.
verdaderas
de mi vida,
como
si el alma dormida
declarara
su pasado,
cuando
éste tengo ocultado
tras
una reja tupida.
Si
a veces recorro mares
vestido
de bucanero,
no
penséis que en un velero
surco
triunfante la mar.
¡No
fuera malo ganar
con
sólo un parche, dinero!
Y
si seduzco mil veces
y
mil veces soy mezquino,
sabed
que no bebo vino
ni
enamoro a las mujeres.
Yo
ya tengo otros quereres,
¡Lo
demás es cuento chino!
Por
eso a partir de ahora,
infatigables
lectores,
admirar
sólo las flores
del
jardín de la verdad.
Luego,
si queréis, soñad,
vuestro
héroe en colores.
Buenos días, amigo Carlos. Lo has dejado bien claro, una cosa es la ficción y otra la realidad. Feliz domingo.
ResponderEliminarGracias, María José, por tu comentario. Como bien dices, hay que distinguir entre realidad y ficción- Otra cosa es que los relatos se basen en hechos que pueden responder a una cierta realidad, pero que, camuflada convenientemente, el verdadero protagonista, no se verá identificado. Un abrazo,
ResponderEliminarMaravillo, Carlos. Recibe mi aplauso.
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