OJOS DE
COLOR INCIERTO
Cuando miro la dulzura
de tus ojos, mis dos
bienes,
con observarlos, me
tienes
enredado a tu figura.
Esta obsesión o locura
en la que vivo atrapado,
es mi secreto guardado
en lo profundo del alma,
que se agita y no se
calma
aunque te tenga a mi
lado.
Por ellos sueño de día
y me desvelo de noche
creyendo, no es un
reproche,
que sin verlos, moriría.
Si alguna vez advertía
en mí tus ojos posados,
al contemplarlos
orlados
de tan hermosas pestañas,
alumbraban mis entrañas
con luz de soles rasgados.
Ojos de color incierto,
verde-azulado:
ultramar,
y a semejanza del mar,
cambiantes a cielo
abierto.
No sé si estoy en lo
cierto
o si es pasión o mentira,
mas, cuando ella
suspira,
muda el iris al momento.
Si no fuera así,
presiento,
que sólo el amor me
inspira.
.
Muy bello poema. La belleza está en los ojos que te miran
ResponderEliminarEs evidente que Cécile es una joven guapísima, pero el amor que siente Álvaro por ella, hace que su belleza alcance cotas infinitas. Gracias por comentar. Saludos.
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