LA DISTANCIA
La distancia, habla.
Percibo su voz a través del bullicio
y del rumor de la fuente en que bebí.
La percibo en las mil imágenes
que pugnan por revivir lo vivido
y en los incontables rostros
atrapados en el recuerdo.
La lejanía más que una distancia medible,
es una sensación pasada
que no termina de amortiguarse,
es un contemplar sin tener el paisaje delante,
aunque el lienzo permanezca vivo,
matizado, quizás, porque la memoria
resalta los momentos felices
para hacernos creer
que aún no perdimos la juventud
ni el miedo a lo desconocido.
En la distancia, los amores frustrados se amortiguan
y brotan con inusitada fuerza
los amores que hacen posible
que el vivir siga teniendo sentido.
A pesar de que la distancia nos separa
de lo que jamás retornará,
sigo alimentando la esperanza
de que un día podré abrazar
el ensueño que me persigue noche y día.
Fotografía: David Dubnistkiy
Portada del Poemario: Manuel Malillos Rodríguez
Bellísimo, Carlos. Como todos tus poemas 💖
ResponderEliminarMuchas gracias, anónimo/a lector. Te deseo un feliz descanso.
EliminarMuy bella poesía. La esperanza nunca se pierde.
ResponderEliminarEstoy contigo, Alie. Si perdemos la esperanza estamos perdidos. Te deseo un excelente inicio de semana.
Eliminar